EBook - Conservas, encurtidos y dulces - Oded Schwartz
En Oriente Medio, de donde soy originario, la afición por los diferentes
tipos de conservas cruza todas las fronteras culturales y religiosas. Al
pasear por cualquier mercado, se observa una asombrosa y variopinta
cantidad de conservas y adobos. El interior de cada una de las tiendecitas
es una pequeña cueva gastronómica, repleta de tarros con especias exóticas,
aceites, carnes y pescados.
Cuando en los años setenta me trasladé a Europa, me decepcionó la poca
variedad de conservas, que desde niño había creído que estaban en todas
partes. Y ello, a pesar de que la materia prima estaba al alcance de la
mano: magníficas frutas y verduras, y gran variedad de carnes y pescados.
Con todos los conocimientos acumulados durante mi juventud, me dispuse
a desarrollar y modificar aquellas antiguas recetas que mejor pudieran
amoldarse al moderno mercado internacional y a los paladares occidentales.
La culminación de mi trabajo se refleja en este libro, que incluye una gran
variedad de técnicas de conservas, tanto dulces como saladas. Mi intención
ha sido darles un toque contemporáneo para que puedan adaptarse a nuestro
modo de vida. Además de ser recetas fáciles de entender y prácticas, están
pensadas para las limitaciones y premuras de la sociedad actual.
Pueden elaborarse conservas todo el año, a un ritmo continuo y natural. El
invierno es un período tranquilo en el que los ingredientes frescos son a
menudo caros y poco asequibles. Es el mejor momento para hacer
mermeladas, ordenar los armarios y planear el resto del año. La primavera
trae brotes y verduras tiernas, y, cuando por fin llega el verano, el ritmo se
acelera a medida que todo madura y los puestos de los mercados se llenan
de gran variedad de frutos. Es tiempo para confeccionar espléndidas
confituras y gelatinas, así como toda clase de conservas dulces. Hacia
finales de verano y principios de otoño, su cocina debe exhalar un
delicioso y dulce aroma de suculentos frutos, especias y hierbas secas. Es
también la época tradicionalmente más adecuada para curar carnes y
embutidos, ahumar pescado y elaborar patés.
Espero sinceramente que Conservasle anime a experimentar el placer y la
inmensa satisfacción que supone poner la propia comida en conserva.
Créaine, hay pocas cosas en la vida más placenteras que producir sus propios
adobos, salsas y condimentos, y poder consumir el fruto de su labor junto
alafamiliyalosamigos.
192 paginas.
Oded Schwartz